martes, 9 de agosto de 2011

¡Porque también existe el terror argentino!

Hollywood nos consume. Nos ata y nos encierra. A veces nos sorprende con una genialidad, otras veces nos decepciona con algun bodrio infumable. Está bien, en lo que a cine respecta, la industria (norte)americana fue, es y será la más importante en todo sentido. Pero allá afuera, acá afuera, el mundo sigue, y sería un error imperdonable darle la espalda a nuestro tan querido y odiado cine argentino (y porque no, latinoamericano).

Uno podría hablar de El Secreto de Sus Ojos, obra, para mí, de lo mejor de la historia del Cine Nacional, pero como este es un blog de terror, hay que hablar de terror nomás. ¿Terror? ¿Argentino!? Si señor, terror argentino. Vamos a hablar de un antes y un después, de dos epocas muy marcadas y diferenciadas.
Para comenzar a hablar nos tenemos que remontar exactamente 40 años atrás. Norteamérica nos deleitaba con la master piece La Naránja Mecánica, dirigida por el mismísimo Stanley Kubrick. Mientras tanto en argentina apuntabamos un poco mas bajo. Es en este mismo año, 1971, cuando aparece La Bestia Desnuda (Si bien en el link dice así de grande 1967, si se fijan bien un poco más abajo se afirma que el estreno fue en el '71.). Hace un tiempo la enganché recién empezada en el Canal Volver, y cómo me deleité, amigos.
Bah, voy a ser sincero con ustedes, no es ninguna merecedora del Oscar precisamente, pero es una película que cumple con su cometido. El film es un Slasher dirigido por Emilio Vieyra (realmente no lo conocía, luego investigué y tiene una filmografía interesante, su última película fue "Cargo de Conciencia", de 2005. Falleció el año pasado, vale aclarar.) que no es más que eso: un Slasher típico, con las características propias del cine argentino y ambientada en una obra de teatro de revista. Leyendo un poco más, supe que el tipo era medio transgresor, en donde el sexo era un componente infaltable en la mayoría de sus películas (por los años 60' y 70' la combinación terror-sexo no era muy bien vista) y La Bestia Desnuda no es la excepción.
Cinematográficamente es interesante, con una buena fotografía pero con actuaciones de las que uno no puede pedir mucho más. El factor suspenso está bien trabajado. La cinta en su totalidad no tiene nada que envidiarle a cualquier slasher clase B ochentoso yanki. De culto.

Año 2011, pasaron ya largos 40 años pero aún hay quienes siguen apostando por éste género que tanto nos gusta. Obviamente ya no en forma de slasher (ni de película, es un mediometraje), sino en el formato que mas éxito tuvo en el terror de estos últimos años: El Falso Documental. Quizás muchos ya la conozcan, hablamos de la buena "Sede Central", producción independiente realizada por Estudiantes de Cine de la ciudad de La Plata. Dirigida, escrita y protagonizada por ellos mismos, no tiene nada que envidiarle a películas como REC. La historia se basa en un grupo de estudiantes de cine (ellos mismos, si se quiere) que van a hacer un documental (uno en serio) sobre La Dictadura Militar del 76' y su relación con su facultad. Pero los chicos, una noche que fueron a grabar imágenes al edificio, desaparecen misteriosamente. Lo único que encuentran es el material que filmaron esa noche. Y allí empieza todo. Clásico, pero efectivo. Muy buenas escenas de suspenso, algunas actuaciones no muy buenas pero en general (la trama no requiere mucho) aceptables.
Esperemos que Sede Central sea un punto de partida, una influencia para otros y para ellos mismos (los creadores). Uno no puede mirarla sin olvidarse que es casi un ejercicio de cine, ni siquiera es una película propiamente dicha (dura unos 40 minutos).

Buenas o malas, fracasos o éxitos, lo bueno es que el Terror sigue existiendo por estas tierras, y esperemos que proximamente en más cantidad.